Un experimento sencillo y barato, comenzado hace más de 25 años en Costa Rica, trajo la renovación de un espacio árido en un frondoso bosque tropical. Y todo gracias a tirar más de doce mil toneladas de desechos de naranja, y la paciencia de 23 años.
COMENTARIOS Y APORTACIONES:
agendanaturaleza0@gmail.com
Capitoli
-
00:00
- Birds_in_Flight
-
07:15
- Birds_in_Flight